Atiquifobia: miedo al fracaso

A no obtener recompensa por mis esfuerzos

Miedo a no llegar a nada en la vida.
No sé cuál es el papel del azar en la vida pero, ¿tengo en claro que conseguiré mis metas?
Siempre luchando, siempre esperando.
Se dice que la vida pone a cada uno en su lugar, pero... ¿es eso cierto?

¿De verdad el que se esfuerza consigue siempre lo que se merece? A veces no lo creo.
¿Acaso no está la Tierra plagada de gente a la que se lo han dado todo, sin merecerlo?
No sé qué acepción le des a la palabra "fracaso"; más nunca lo serás si no te sientes un fracasado.
Sigue luchando por tus sueños.
¿Puedes decir conmigo: "Yo no sé desistir"?

Atazagorafobia: miedo a ser olvidado

Miedo a no ser considerado, a ser olvidado.
A que nadie me valore, a no dejar huella en quien me importa.
Supongo que ésta será una de las mayores fobias de los famosos, ¿no creen?
Imagínate, un artista olvidado es como si nunca hubiera existido, como si nunca hubiera actuado.
Y sin ir tan lejos... ¿acaso no nos gusta a todos sentirnos considerados?
¿Acaso te gustaría ser olvidado? Seguramente a que no.
Pensar que, quizas, toda esta gente que ahora nos rodea día tras día, cuando acabemos la época que estamos viviendo, nos olvidarán con facilidad.
Aceptar que en algún momento dejaremos ser el centro de nuestra familia, de nuestro trabajo, de nuestras amistades, para ocupar un papel secundario, es señal de madurez. Es una ley de vida.

Batofobia: miedo a las profundidades

Cuando tememos a no saber qué hay bajo nuestros pies, a lo desconocido.
Miedo el mar. No es el mar a lo que tememos, sino a sus profundidades, a lo que esconde.
A no hacer pie en un mundo que nos es extraño, en el que sé que estoy en inferioridad de condiciones. En el que no sabemos lo que hay debajo...
Al menos no temo a "mis profundidades..." ¿y vosotros?
¿Temen buscar en su interior por miedo a lo desconocido?
El camino a la libertad tiene varias etapas, una de ellas es aprender a bucear en nuestro interior.

Eremiofobia: miedo a estar sol@

Necesitar compañia y no tenerla. Morir sol@.
No es el miedo a estar sol@ porque sí. 
A muchos nos gusta estar solos en algunos momentos.
A mi me encanta disfrutar de la música, la lectura, sin más compañia que la mía.
El problema viene cuando estás mal, cuando no deseas estar sol@... y lo estás.
Y que hay mas aterrador que, llegada la hora de nuestra muerte, no haya nadie que nos aferre la mano.
Acompañemos, para que cuando lo necesitemos, también tengamos compañía.
Cuidemos a esas personas para no acabar sol@s. Aunque si solamente lo hacemos por eso... seremos infelices.